jueves, 30 de julio de 2015

Dia 12- Cómo encontrar a Cristo 1



Cómo encontrar a Cristo - 1 Día 12

 El contenido de las dos próximas jornadas, “Cómo encontrar a Cristo” 1 y 2, fue adaptado del capítulo 3 del libro: Cómo tornar real el cristianismo, escrito por el pastor Morris Venden. Con humildad y espíritu de sumisión, vamos a continuar nuestra jornada. ¿Ya imaginaste que sucedería si Dios estuviese perdido? En el pasado, pareció estar perdido que algunos creyeron que estaba muerto. Si Dios no está perdido, ¿por qué es tan difícil encontrarlo?
Hace varios años leí una carta escrita por un joven en edad colegial, y jamás fui capaz de olvidar su clamor pidiendo socorro: “Muchos de nosotros, fieles jóvenes miembros de la iglesia, estamos en una situación desesperada. Tenemos una enorme, amplia y profunda necesidad que no está siendo satisfecha. Estamos muriendo de inanición, porque no estamos siendo alimentados”. “Por favor, tómenme en serio, porque yo sé de lo que estoy hablando. Diariamente jóvenes están dejando la iglesia, amargados, desengañados y sin esperanza, mientras otros ni se interesan por la religión, pues no ven en ella nada que los ayude”.


“No necesitamos más sermones en relación con dar testimonio a otros. Muchísimas veces nos es dicho que debemos compartir el evangelio; pero, al responder a este desafío, descubrimos que no tenemos nada que decir. ¿Cómo podemos convencer a otros de esperar el retorno de Cristo si la mayoría de nosotros no podría reconocerlo si viniese hoy? Necesitamos de alguien que nos hable sobre Dios. Sabemos todo en relación con doctrinas y prácticas de la iglesia”. “Conocemos muchas cosas, pero no conocemos a Cristo. Nunca nos lo presentaron, y a menos que Dios obre un milagro y se nos revele, jamás lo conoceremos”.

 “Por favor, enséñennos cómo conocer a Dios y su carácter. Somos bebés espirituales. Necesitamos a Jesús. Anhelamos conocerlo. Muéstrennos, con su experiencia personal, cómo podemos comunicarnos con él. Nuestra mayor necesidad es conocer a Dios. ¿Pueden mostrarnos cómo encontrarlo?” Esta interrogación sobre “cómo encontrar a Cristo” no está confinada a los jóvenes de 20 años de edad. Personas que durante 20 años han sido fieles miembros de iglesia también han admitido su frustración al intentar encontrarlo. Una vez alguien describió de este modo su desesperación: “Creo que Dios ni sabe mi dirección”. Es interesante notar que algunos personajes bíblicos parecen haber tenido la misma dificultad al intentar encontrar a Dios. Job 23:3 revela el clamor desesperado de un alma hambrienta:
 “¡Quién me diera el saber dónde hallar a Dios!” Amós 8:12
menciona a un grupo de personas que corren errantes de mar a mar, desde el norte hasta el oriente, buscando la palabra del Señor y no siendo capaces de hallarla.

CONTENIDO COMPLETO PARA HOY.

No hay comentarios:

Publicar un comentario